Movilizaciones en provincias contra la reforma laboral
Las plazas principales de las capitales del Noroeste argentino resonaron con manifestaciones de gremios, sindicatos y movimientos sociales que protestaban contra el proyecto de reforma laboral del gobierno. Las concentraciones más destacadas se dieron en Tucumán, Catamarca y La Rioja durante el mediodía, mientras que por la tarde extendieron su alcance a Salta, Chaco y Formosa.
Hugo Brito, secretario general del gremio docente ATEP, enfatizó que toda la clase trabajadora está unida en contra de esta reforma, a la que calificó de un retroceso significativo. “Esta reforma no moderniza, retrocede”, aclaró Guillermo Toledo, delegado regional de los jerárquicos de Comercio. La preocupación por el futuro laboral fue un tema recurrente en las intervenciones de los líderes sindicales.
En Tucumán, la planta se concentró en la plaza Independencia, frente a la Casa de Gobierno. Ahí, trabajadoras y trabajadores de la CGT, las dos CTA, y diversos sindicatos como el de Camioneros, UOCRA, y ATEP, se unieron para hacer escuchar su voz. Era evidente el compromiso de todos por defender sus derechos y su futuro.
En Catamarca, la movilización llegó al Paseo de la Fe, el corazón de San Fernando del Valle de Catamarca. Durante la protesta, el sindicalista Walter Arévalo no dudó en criticar a la CGT, acusándolos de falta de acción en tiempos difíciles. A pesar de algunos momentos tensos, la mayoría de los manifestantes mantuvieron el enfoque en sus demandas: la protección de los derechos laborales.
La situación en La Rioja fue similar. Un gran número de organizaciones, incluidas la CTA y ATE, marcharon desde el centro de la ciudad hacia la Plaza 25 de Mayo. Allí, se expresaron preocupaciones genuinas sobre cómo la reforma podría afectar a las familias trabajadoras. Luis Arce de ATE resaltó que no se oponían solo a la reforma, sino a despidos y precarización de los empleos.
En Jujuy, la marcha también fue multitudinaria. Allí, la CGT y las CTA mostraron su descontento con la reforma laboral, señalando que va en contra de los derechos de todos los asalariados. Freddy Berdeja, un referente local, lo explicó claramente: esta reforma atenta contra el pueblo entero.
La jornada culminó en un contexto donde, ya se sabía, que el Senado había decidido diferir el tratamiento del proyecto hasta febrero, después de una serie de presiones y movilizaciones notorias. La voz de los trabajadores resonó con fuerza, poniendo en relieve sus inquietudes y demandas.